México se ha convertido en el Bangkok de América Latina. Conoce qué puedes hacer para ayudar a detener y prevenir este delito.
La gente posee diferentes motivos que la llevan a realizar turismo de distintos tipos, para lo cual existe toda una infraestructura con recursos humanos y materiales dispuestos, de manera profesional, para satisfacer sus necesidades e intereses.
Existe uno, en particular, que propone al turista el mantener relaciones sexuales, ya sea con individuos con intereses románticos afines y de manera casual o, bien, mediante pago, es decir, con personas que ejerzan la prostitución.
Este ilícito, que ha tenido lugar en el mundo a lo largo de la historia, ha logrado desarrollar una serie de destinos, considerados como paraísos, en los que la tolerancia y un aparente control por parte de las autoridades, ha permitido satisfacer los intereses de sus clientes. Sin embargo, dichos intereses van más allá de sostener relaciones con personas adultas, buscando tenerlas con menores de edad.
En ese sentido, esta actividad con niños y adolescentes es un fenómeno que va en aumento, concretamente en América Latina y de manera particular en México, donde el Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes, en 2019, alertó que 20 mil menores habían sido víctimas de la prostitución, principalmente en centros turísticos tales como Acapulco, Cancún, Guadalajara y Tijuana (datos de DIF).
Este flagelo representa un gran negocio, al cual han entrado las redes delincuenciales que, a través de la trata de personas, secuestran a los menores con fines de explotación, traficando con ellos a nivel mundial para beneficio de los pedófilos que, desde muchas partes del mundo, se trasladan a los centros de explotación.
Según el titular de la Unidad de Inteligencia Financiera de México, este ilícito deja ganancias de 12,000 millones de dólares en América Latina, enfocándose en cinco países de la región: Bolivia, Brasil, Colombia, México y Perú, según Unicef.
Lo anterior ha llevado a las autoridades a considerar a México el nuevo "Bangkok de América Latina", estimando que un 36% de los clientes proceden de los Estados Unidos, Canadá, Inglaterra, Holanda y Alemania.
Países en que ocurre el turismo sexual infantil
Los menores victimizados, frecuentemente, son niños y jóvenes que viven en situaciones de pobreza y en condiciones de vida callejera, que han sufrido de violencia intrafamiliar y abusos de todo tipo, que presentan graves trastornos emocionales, psicológicos y físicos como resultado de su explotación.
No podemos ni debemos permanecer cruzados de brazos ante esta situación, es preciso conocer respecto del problema y reconocer la realidad en la que se encuentran miles de menores y el riesgo que enfrentan millones de niños y jóvenes en el mundo.
Denuncia ante las autoridades cualquier anuncio o promoción que proponga este tipo de actividades y, desde luego, si observas a un turista abusando de un menor o a una persona que venda o promocione este tipo de servicios.
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