Las habilidades interpersonales nos ayudan a comprender y aceptar sentimientos y forma de ser de otros. Aprende a desarrollarlas e inculcarlas a tus hijos.
Ana María salió con Antonio, su novio, el sábado por la noche y al salir del estacionamiento del cine, ya en la calle, al parecer por un incidente menor de tránsito, Antonio inició una discusión con los tripulantes de otro vehículo. Ése fue el último momento en el que la pareja fue vista. Ana María y Antonio forman hoy parte de las miles de personas desaparecidas en México, sus fotografías circulan en las redes sociales con la esperanza de encontrar alguna pista o rastro de ellos.
Lo sucedido continúa siendo un misterio, la esperanza de que se hubiese tratado de un secuestro se disipa con el tiempo, ya que ninguna de sus familias ha recibido llamada alguna para pedir dinero por su rescate. ¿Habría sido, acaso, el haber estado en el lugar y momento menos indicado y toparse con delincuentes? Es muy posible, pero quizá influyó el tipo de reacción que se tuvo con las personas, en el incidente, no fue la más adecuada y ello desató la furia de los otros.
Ante los elevados índices de violencia existentes en el mundo, resulta evidente que los seres humanos continuamos siendo incapaces de convivir, tolerar nuestras diferencias y resolver conflictos, lo cual limita nuestras capacidades de desarrollo personal y social en una atmósfera que, de prevalecer, nos postrará en un ambiente inhóspito y adverso para la vida digna.<br>
De manera acompasada a las habilidades intrapersonales que todo individuo debe poseer, se deben desarrollar habilidades interpersonales, a fin de expresar sentimientos, actitudes, deseos, opiniones o derechos de un modo adecuado a la situación, respetando dichas conductas en los demás.
Las habilidades interpersonales no son un rasgo de personalidad, sino un patrón de conductas específicas en situaciones sociales concretas que se deben aprender, a fin de desarrollar buenas habilidades de comunicación para relacionarse adecuadamente con otras personas pero, asimismo, para evitar ofensas, agresiones o actos de violencia provocados por un individuo o detonados en otros.
Debemos, por lo tanto, considerar el desarrollar en las personas, especialmente en niños y jóvenes, aspectos tales como:
Asertividad.
Habilidad para expresar los propios sentimientos, pensamientos y creencias, defendiendo su posición ante los demás de manera constructiva.
Empatía.
Habilidad para conocer, entender y apreciar los sentimientos de otros.
Colaboración.
Habilidad para contribuir y cooperar con otros, así como ser un miembro productivo en un grupo social.
Manejo de relaciones sociales.
Habilidad para establecer y mantener relaciones satisfactorias, caracterizadas por el respeto y la tolerancia.
Solución de problemas.
Habilidad para identificar y definir los problemas, así como generar e implementar soluciones efectivas de manera colegiada.
Comunicación.
Habilidad para intercambiar información y ponerla en términos comunes para alcanzar el mismo objetivo.
Es preciso reflexionar respecto de las capacidades que como personas poseemos, pero asimismo de los retos y desafíos que enfrentamos a nivel social, particularmente en nuestras familias y comunidades, preocupándonos por conocer las formas de desarrollar habilidades sociales intra e interpersonales y reconocer la manera de contribuir proactivamente en la resolución de problemas, a través de una comunicación y diálogo efectivos.
Para conocer si cuentas con buenas habilidades sociales intrapersonales e interpersonales, así como la forma de desarrollarlasen tus hijos, ponemos a tu disposición los siguientes materiales:
1) Desarrollo Socioafectivo, reorganización curricular por ciclos. Herramienta pedagógica para padres y maestros. Desarrollado por la Secretaría de Educación de la Alcaldía Mayor de Bogotá.
2) Guía breve de educación emocional para padres y educadores, desarrollado por la Asociación Elisabeth d'Ornano.
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